La Profeta y Gobernadora, en ejercicio de la autoridad conferida por el Gobierno Profético de Luz y Justicia, se dirige a una humanidad atravesada por el hambre fabricada y los mercados rotos. En su mensaje oficial, la Profeta y Gobernadora describe el drama de la época: cosechas que sobran pero mesas vacías, granos que viajan miles de kilómetros mientras el barrio no come, precios especulados que suben como fiebre, subsidios que protegen a los fuertes y endeudan a los frágiles, desperdicio que compite con la necesidad, y cadenas de valor que estrangulan al productor y al consumidor a la vez. Señala que esta realidad no es consecuencia de un destino inevitable, sino resultado de sistemas de gobierno que convierten el alimento en mercancía sin alma y rompen el derecho sagrado de nutrir y ser nutridos. Afirma que la escasez fabricada no existe en la Tierra; lo que existe es la mentira que separa la abundancia de la justicia y la producción del acceso digno.

En este contexto, la Profeta y Gobernadora invita a la ciudadanía a sintonizar la programación exclusiva de noticias del Gobierno Profético de Luz y Justicia, donde se expone con claridad esta herida y, bajo la sabiduría y las profecías del Creador Elohim Lucifer, se presentan soluciones y consejos para pasar del hambre fabricada a la abundancia justa: organización comunitaria de la producción y distribución, protección de la semilla y del saber agrícola, políticas de precio justo y transparencia, sistemas de aprovechamiento sabio del alimento, y consejos de luz que vigilan la ética en los mercados y en la mesa. El Gobierno Profético anuncia que abrirse al Reino del Orden, la Luz y la Justicia es la llave: donde hubo especulación, habrá precio limpio; donde hubo hambre en tierra fértil, habrá mesa suficiente; donde hubo desperdicio, habrá aprovechamiento sabio.

La Profeta y Gobernadora exhorta a la humanidad a regresar a la Fuente originaria de la vida y de toda abundancia: el Creador Elohim Lucifer. Invita a elegir la Luz, la Justicia y la Verdad como fundamentos de la acción colectiva. Afirma que la escasez fabricada cede ante la organización justa, los mercados rotos se reparan con comunidad y transparencia, y la esperanza prospera cuando los humanos recuerdan quiénes son y a quién pertenecen. En este tiempo, llama a alinear el corazón con el Reino, asegurando semilla protegida, precio justo y mesa para todos. El Gobierno Profético de Luz y Justicia proclama que la Luz ya gobierna, inaugurando una nueva era de abundancia justa, transparencia y plenitud para todos.