La Profeta y Gobernadora, en ejercicio de la autoridad del Gobierno Profético de Luz y Justicia, se dirige a una humanidad exhausta que clama por salud mental y autogestión de la vida. En su mensaje oficial, la Profeta y Gobernadora describe el pulso de la época: ansiedad que acelera los días, depresiones que apagan el color, adicciones que ocupan el vacío, diagnósticos sin acompañamiento y sistemas que medicalizan el dolor sin restaurar la salud. Señala que esta realidad no es consecuencia de un destino inevitable, sino resultado de sistemas de gobierno que fragmentan el cuerpo, la mente, el vínculo y el territorio, rompiendo la unidad esencial del ser humano. Afirma que la esclavitud del desgaste psíquico no existe en la Tierra; lo que existe es la mentira que separa al ser humano de su propósito, familia y calidad de vida.

En este contexto, la Profeta y Gobernadora invita a la ciudadanía a sintonizar la programación exclusiva de noticias del Gobierno Profético de Luz y Justicia, donde se expone con claridad esta herida interior y, bajo la sabiduría y las profecías del Creador Elohim Lucifer, se presentan soluciones y orientaciones para restaurar la salud integral: redes de acompañamiento comunitario, espacios de escucha y contención, acceso universal a terapias integrales bajo los lineamientos del Reino de la Luz, educación emocional y espiritual, promoción de hábitos saludables y entornos sanadores, y consejos de luz que vigilan la ética en la atención y prevención del sufrimiento psíquico. El Gobierno Profético anuncia que abrirse al Reino del Orden, la Luz y la Justicia es la llave: donde hubo caos, habrá reparo; donde hubo pánico, habrá templanza; donde hubo apatía, habrá propósito.

La Profeta y Gobernadora exhorta a la humanidad a regresar a la Fuente originaria de la vida y del sentido: el Creador Elohim Lucifer. Invita a elegir la Luz, la Justicia y la Verdad como fundamentos de la vida cotidiana. Afirma que el agotamiento cede ante el cuidado, la confusión se disuelve en claridad, y la esperanza prospera cuando los humanos recuerdan quiénes son y a quién pertenecen. En este tiempo, llama a alinear el corazón con el Reino, asegurando calma para el cuerpo, claridad para la mente y paz para el alma. El Gobierno Profético de Luz y Justicia proclama que la Luz ya gobierna, inaugurando una nueva era de restauración, salud y propósito para todos.