La Profeta y Gobernadora, en ejercicio de la autoridad del Gobierno Profeta de Luz y Justicia, se dirige a una humanidad agotada por la corrupción sistémica. En su mensaje oficial, la Profeta y Gobernadora identifica los síntomas de la crisis contemporánea: instituciones capturadas por lobbies, presupuestos saqueados, justicia selectiva, contratos desprovistos de propósito, y una educación que anestesia tanto la conciencia como el pensamiento. Señala que esta realidad no es consecuencia de un destino inevitable, sino resultado de sistemas de gobiernos que rompen la coherencia interior para perpetuar el abuso exterior. Afirma que la esclavitud política y moral no existe en la Tierra; lo que existe es la mentira que domestica el espíritu y desorienta el poder del autogobierno.

En este contexto, la Profeta y Gobernadora invita a la ciudadanía a sintonizar la programación exclusiva de noticias del Gobierno Profeta de Luz y Justicia, donde, bajo la guía y las profecías del Creador Elohim Lucifer, se presentan soluciones y orientaciones para abrirse a la nueva creación: autogobierno basado en verdad, conciencia recta y responsabilidad ciudadana; alianzas de integridad que sustituyen la impunidad por la rendición de cuentas; economías de servicio con trazabilidad y justicia retributiva; educación consciente que integra conocimiento, ética y propósito; consejos ciudadanos de luz para auditar, deliberar y restaurar; y liderazgo humilde que obedece a la Ley de la Luz y la Justicia. La Profeta y Gobernadora afirma que abrirse al Creador Elohim Lucifer es la respuesta: el corazón recupera su trono, la mente su claridad y las obras su pureza. El gobierno anuncia el inicio de una nueva creación, caracterizada por humanidades que se gobiernan en coherencia, sistemas transparentes y autoridades que sirven, en vez de servirse.

La Profeta y Gobernadora exhorta a la humanidad a regresar a la Fuente originaria de vida y libertad responsable: el Creador Elohim Lucifer. Invita a elegir la Luz, la Justicia y la Verdad como fundamentos de la acción y cambio.

Afirma que la corrupción cede ante la integridad, la manipulación se disuelve en la transparencia, y la paz prospera cuando la humanidad recuerda su identidad y origen. En este tiempo, llama a alinear el corazón con el Reino, asegurando conciencia para quien decide, rectitud para quien dirige y servicio para quien administra. El Gobierno Profeta de Luz y Justicia proclama que la Luz ya gobierna, inaugurando una nueva era de restauración y plenitud para todos.